Un “elixir” madrileño con carácter. Compuesto por 90 % Garnacha de Madrid y 10 % Tempranillo, pasa su plenitud en barrica y luego permanece dos años en botella antes de salir al mundo.
Nariz intensa: torrefacto, vainilla y fruta madura que aún mantiene su frescura. En boca es redondo, envolvente y persistente, con taninos elegantes y esa acidez justa que lo sostiene.
Ideal para acompañar carnes rojas, guisos bucólicos o una charla pausada al caer la tarde.
Un “elixir” madrileño con carácter. Compuesto por 90 % Garnacha de Madrid y 10 % Tempranillo, pasa su plenitud en barrica y luego permanece dos años en botella antes de salir al mundo.
Nariz intensa: torrefacto, vainilla y fruta madura que aún mantiene su frescura. En boca es redondo, envolvente y persistente, con taninos elegantes y esa acidez justa que lo sostiene.
Ideal para acompañar carnes rojas, guisos bucólicos o una charla pausada al caer la tarde.