Notas de cata:
• Color: Un dorado brillante que promete grandeza con cada reflejo.
• Nariz: Aromas golosos de mazapán, compota de albaricoque, miel y pan recién horneado, con una frescura cítrica que te despierta los sentidos.
• Boca: Sabores complejos de ciruelas mirabel, melocotón y cítricos, con un final salino y notas de avellanas frescas que se quedan contigo más tiempo que un buen recuerdo.
Maridaje:
Perfecto con avellanas tostadas, quesos como gruyere o simplemente como protagonista de cualquier celebración.
Temperatura de servicio:
Entre 6 y 8 ºC, porque un champagne así merece estar en su mejor forma.
Puntuaciones:
Unánimemente aclamado por los críticos, este champagne demuestra por qué Bollinger sigue siendo un referente de lujo y excelencia.
En resumen:
Bollinger R.D. 2008 no es solo para ocasiones especiales, ¡es el champagne que hace que cualquier momento se sienta como una escena de película!